sábado, 4 de julio de 2009

ABSTRACT

Cuando el docente planifica su trabajo, debe tomar en cuenta, habitualmente, las diferentes formas de aprender de sus alumnos. Esto lo logra realizando un diagnóstico integral de los y las estudiantes, utilizando variados instrumentos (entrevistas profundas, cuestionarios, autobiografías, cuestionarios, etc.).

Cuando se encuentran problemas que exceden a la normalidad, como por ejemplo problemas de aprendizaje, rasgos de personalidad atípicos, se debe hacer una derivación, generalmente a una psicopedagoga u otro profesional, o formar un equipo interdisciplinario que estudiará los casos y hará un diagnóstico para emitir un informe respecto a los problemas de aprendizaje u otros que estos alumnos tienen. Cuando se han detectado los problemas, estos estudiantes, son considerados como alumnos o alumnas con necesidades especiales, los cuales requerirán de ajustes pedagógicos, recursos especiales y actitudes adecuadas, que respondan a lo que su condición requiere.

La atención de la diversidad y a la inclusión tienen su origen a mediados del siglo XIX cuando se crearon escuelas especiales para impartir educación especial, lo que se denomina la Era de la Institucionalización, luego a mediados del siglo XX se desarrolla el concepto de Integración donde los ambientes educativos se volvieron menos restrictivos y actualmente se considera la Inclusión, para lograr una educación más igualitaria y equitativa, tomando en cuenta la diversidad e implementando ambientes de participación.

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